Intel ya no es el mayor fabricante de procesadores y Nvidia toma medidas frente a AMD.
Es curioso el comportamiento de las grandes empresas. Y es que aunque hablemos de organismos compuestos por miles de trabajadores, su forma de actuar muchas veces no difiere de la de simples individuos. Os decimos esto porque un grande como Intel, a día de hoy, es un poquito menos grande de lo que había sido hasta ahora. Y es que Samsung le ha arrebatado el puesto de mayor fabricante de procesadores, un mérito que el rey del x86 había ostentado con mano de hierro hasta hace poco.
Y si nos vamos al terreno gráfico vemos como Nvidia, el mayor fabricantes de chips enfocados al mundo de los videojuegos en PC, ha demostrado en un ejercicio de total descaro que las grandes empresas no siempre dan lo mejor de sí, y que solo cuando la competencia aprieta, están dispuestos a jugar sus mejores cartas. Os contamos con detalle estos sucesos.
Samsung es ahora el mayor fabricante de procesadores y AMD le ha ayudado.
Si hay algo que nos ha enseñado el mundo de la tecnología es que no te puedes despistar ni un segundo. Hemos visto caer a grandes como Nokia y Ati, y ahora es Intel el que paga las consecuencias de una temporada demasiado larga en la que las mejoras en los procesadores x86 han llegado mucho más lentas de lo que nos habría gustado a los usuarios.
Intel se ha confiado, y es que tras varios años en los que su rival rojo no daba en la tecla a la hora de desarrollar una arquitectura potente y eficiente, por fin ha conseguido terminar el curso con matrícula; algo que a los azules les ha pillado con el pie cambiado. AMD ha dado un salto cualitativo enorme con su arquitectura Ryzen para procesadores; y aunque en el segmento gráfico la cosa pinta regular con una arquitectura Vega que llega tarde y gastona, los de Sunnyvale han conseguido incrementar sus beneficios y cuota de mercado de forma bastante significativa.
Y como a río revuelto ganancia de pescadores, ha sido un gigante como Samsung (empresa más rentable del mundo) el que ha aprovechado para arrebatarle el trono a Intel como mayor fabricante de procesadores. Y es que el mercado móvil sigue en alza, y mientras Intel ha sido incapaz de hacerse un hueco en el mundo a pesar de todos sus recursos, los de Corea del Sur han apostado muy fuerte por sus propios SocS para smartphones, pero también para el IoT y los vehículos inteligentes.
No es que Intel haya ganado poco dinero, pues sus beneficios alcanzan los 14.800 millones de dólares, pero es que Samsung Semiconductors, tras 24 años, ha conseguido superarle con un beneficio total de 15.700 millones de dólares (solo con sus procesadores, además de 54.000 millones extra como fabricante de memoria).
Y es que Intel lleva desde su serie 2000 ofreciendo un máximo de 4 núcleos y 8 hilos en la gama media, y no ha sido hasta la llegada de los Ryzen 5 1600 y 1600X, cuando esta empresa se ha atrevido a lanzar procesadores de 6 núcleos en el segmento mainstream; procesadores que llegan bajo la arquitectura Coffee Lake, pero que podrían haber llegado mucho antes si hubiera existido competencia.
No parece que las cosas vayan a mejorar a priori, ya que los Ryzen 3 acaban de llegar y los Ryzen Threadripper han despertado muchísimas expectativas; por lo que habrá que ver como se las apaña el gigante con sede en Santa Clara para frenar esta tendencia. Por ahora, el puesto de mayor fabricante de procesadores parece que estará una buena temporada en manos de los coreanos.
Nvidia también se esfuerza cuando la competencia aprieta.
Otra empresa que parece que solo da lo mejor de si cuando la competencia aprieta es Nvidia, y es que hemos sabido que con sus últimos drivers versión GeForce 385.12 Beta, este popular fabricante de chips gráfico habría añadido nuevas funcionalidades de corte profesional a su tarjeta “gaming” más cara, la Titan Xp.
La razón de esto no sería otra que el lanzamiento de la AMD Radeon Pro Vega Frontier, equivalente de la Titan Xp en ese confuso segmento de las tarjetas de uso mixto para juegos y tareas profesionales, y que con un precio bastante inferior de 999 dólares y un rendimiento muy destacado con algunos programas, le habría puesto las cosas muy complicadas a la Titan Xp; todo ello a pesar del mejor consumo de esta última, (250w frente a los 300 -aire- o 375w -agua- que consume la Radeon Vega Frontier).
Supuestas ventajas de rendimiento de la Vega Frontier frente a su rival, al menos hasta el lanzamiento de estos nuevos drivers.
Con esta jugada Nvidia intentará frenar las ventas de su rival en el lucrativo mercado profesional, ofreciendo una competencia más fuerte no solo frente a la Radeon Pro Vega Frontier, sino frente a las demás tarjetas de corte empresarial, aquellas que serían competencia de la gama Quadro del fabricante y que suelen llegar bajo la coletilla Pro WX.
A día de hoy no se han especificado en que consistirían estas mejoras, aunque sí sabemos que una aplicación tan famosa como Maya habría visto aumentado su rendimiento hasta 3x veces, demostrando lo capada que había llegado esta tarjeta al mercado, y como los fabricantes bloquean características presentes en su hardware solo para segmentar aún más el mercado y aumentar los beneficios.
Aunque la Nvidia Titan Xp sigue siendo una opción más cara (1350 euros aproximadamente frente a los 1200 euros de la Frontier más barata), debemos tener en cuenta que ofrece un rendimiento bastante mejor que la arquitectura Vega en juegos, por lo que con estos nuevos drivers, tenemos ante nosotros un producto mucho más redondo en todos los aspectos y que ve justificado en parte su aumento de precio respecto de la Nvidia GTX 1080Ti.
Acabamos recordándoos que la Nvidia Titan Xp integra un chip Pascal GP102 compuesto por 3840 CUDA Cores, 240 TMUs y 96 ROPs funcionando todos ellos a una frecuencia Base/Turbo de 1417/1531 MHz. La memoria gráfica es de tipo GDDR5X y sería capaz de desarrollar un ancho de banda de 547.6 GB/s gracias a su velocidad de 11.4 GHz y su bus de 384 bits (484 GB/s en el caso de la Radeon Pro Vega Frontier Edition).
Por ahora no parece que Nvidia vaya a dejar de ser el mayor fabricante de procesadores para el mundo gaming, pero Vega apunta maneras y AMD no da a basto para contentar a los “criptomineros”, por lo que este status podría también cambiar antes de que nos demos cuenta. Bendita competencia.
