Internet se ha convertido en algo indispensable en nuestras vidas. Por eso, seguramente todos los que estáis leyendo este artículo tenéis Internet en casa. Como es un elemento más en nuestro hogar, también tiene su sitio. Todos tenemos un router en alguna parte de nuestra casa que nos facilita el acceso a Internet. Muchas veces es el router que nos proporciona la compañía o la operadora. Hoy nos planteamos qué diferencias hay en tener el router de la operadora o comprar un router propio. Así como las ventajas que esto nos aportará. En definitiva, nos hacemos la siguiente pregunta: ¿Deberíamos comprar un enrutador en lugar de usar el de nuestra operadora?
En este artículo trataremos de dar respuesta a esa pregunta. Pero antes de comenzar, tenemos que saber qué tipo de router es el que tenemos. No todos los router son iguales. Es probable que necesitemos un router más moderno y avanzado, como el Fritz 7590, o simplemente, porque nuestra conexión y uso de Internet es convencional, podamos bastarnos con uno más sencillo. Esto dependerá, a parte del tipo de conexión que usemos, de el número de dispositivos que queramos conectar. Así como, en ocasiones, también influirá en nuestra decisión su diseño, materiales y colores.
Router Fritz 7590
Por qué usar el router de la operadora y no comprar un router propio
Antes de decantarnos por una opción u otra es buena idea saber qué beneficios nos aporta cada uno.
El router de la operadora puede ser gratuito
Normalmente, los routers que nos dan las operadoras suelen ser gratuitos. Simplemente por darnos de alta con su compañía e instalar Internet nos regalan un router. De modo que es algo rentable. El problema llega cuando queremos dar de baja el servicio o abandonar a esa compañía. Entonces se nos exige devolver el router, por tanto nos quedaríamos sin nada. Tenemos que tener esto en cuenta al quedarnos con el de la compañía. Pues además, los plazos de entrega del router son bastante cortos y puede suponernos un conflicto. En una ocasión, tuve que devolver un router a una operdora y ésta me exigía devolverlo en un plazo de 7 días y en persona en una de sus tiendas. Mi experiencia no fue muy buena, pues me di cuenta de que las operadoras exigen sus routers sin tener en cuenta la asistencia al cliente que deberían prestar.
El router de la operadora debe ser devuelto
Las prestaciones del router de la operadora son menores
Seguramente, el router que nos proporcione una operadora contará con un funcionamiento básico. Sus prestaciones serán comunes y simples. Suelen contar con tan solo un puerto de conexión, así que si queremos conectar más de un dispositivo al router nos va a resultar difícil. Si será posible conectar al WiFi varios dispositivos, pero si es por cable solamente suele poder conectarse uno o dos. Los routers de las operadores no suelen contar con muchos puertos de acceso. Por no hablar de los puertos USB. Muchos de los routers de la compañías telefónicas no saben siquiera lo que es eso ni para lo que sirve un puerto USB.
Un router comercial tendrá más calidad
La calidad de estos routers suele ser bastante básica. Es decir, se limita a la potencia contratada. No nos permitirá mejora mucho la conexión contratada si su potencia y calidad es baja. Es más que probable que haya partes de nuestra casa a las que no llega Internet, en muchas ocasiones esto se debe a la baja calidad del router. Esto también afecta a su funcionalidad. Los routers de las operadores cuentan con funciones básicas, limitándose al encendido y el pagado. Pocas cosas podemos mejorar si tampoco permiten la libre configuración de estos dispositivos. Las operadoras los configuran a su antojo sin tener en cuenta nuestras preferencias.
Comprar un router puede ser una inversión futura
Muchos de nosotros nos negamos a comprar un router porque nos supone un gasto extra. Creemos que con el de la operadora es suficiente y no sabemos lo equivocados que estamos. Un router comercial puede ser una inversión a largo plazo. Está claro que si escogemos un router con buenas prestaciones la calidad de nuestra conexión mejorará. Este router tendrá más potencia que el de la operador y la conexión llegará a todos los lugares de la casa. Además, podremos configurarlo libremente a nuestro antojo. Comprar un router propio nos permite elegir sobre sus accesorios. Podemos comprar uno que cuente con tantos puertos de conexión como necesitemos y de las modalidades que sean necesarias. Además, si en un futuro abandonamos la operadora no tenemos que preocuparnos de devolver el router.
Un router propio es una inversión a largo plazo
Comprar un router propio es una buena forma de compartir gastos. Os preguntaréis qué tiene esto que ver. Si vivís en una comunidad, en muchas veces el Internet es compartido. Si cada inquilino cuenta con su router propio puede conectarse al de la comunidad y reducir gastos en Internet. Igual ocurre si lo compartes con un familiar.
¿Necesitamos comprar un router propio?
Tras valorar los beneficios de usar el router de la operadora y comprar un router propio, creemos que lo ideal es comprarlo y tener uno propio. Está claro que si usamos Internet a diario y en gran cantidad, necesitamos un router propio. Si en casa somos muchos y nos conectamos a la vez a Internet, con un router de la operadora esto será de lo más tedioso. Por el simple hecho de que no podremos acceder a una configuración más avanzada. Sin embargo, al comprar un router podemos configurarlo a nuestro gusto. Tampoco será posible que la calidad de la conexión para todos y en todo momento sea la misma. Recordemos que los routers de las operadoras cuentan con una calidad mínima y básica. Comprar un router nos permitirá elegir entre tener una calidad sencilla y tener una calidad óptima que nos permita trabajar en Internet sin problema, mientras otros juegan on line o ven una serie con total conexión.
No pensemos que si no hacemos un uso intensivo de Internet no necesitamos comprar un router propio. En el mercado hay miles de modelos de routers y que se adaptan a nuestras necesidades. Dependiendo de su finalidad podemos elegir el mejor para nosotros.
