En el marco del Computex 2024, ASUS ha aprovechado la cita para mostrar su próxima gran revolución. La renovación de su consola portátil, la ROG Ally, llega con un nuevo modelo llamado ASUS ROG Ally X, apoyado en un hardware espectacular con el que prometen aguantar nuestro ritmo, sean cuales sean nuestras necesidades. Pero, ¿es realmente tan impresionante como la pintan? Hoy quiero repasar contigo todas las novedades que trae esta consola para que podamos valorar juntos si es una buena opción de compra o si todo es producto de la magia del marketing.
ASUS ROG Ally X: ¿qué novedades trae respecto al modelo anterior?
ASUS afirma haber escuchado las peticiones de los usuarios y presenta ahora un modelo totalmente renovado y que, personalmente, sí que me parece una verdadera (y necesaria) evolución respecto a la generación anterior. Sus novedades se apoyan principalmente en cinco patas: almacenamiento, batería, RAM, ergonomía y refrigeración. Cinco puntos que son protagonistas en un tipo de consolas como estas.
Si todavía no tienes claro qué es la ASUS ROG Ally X, déjame comentarte brevemente ante qué tipo de producto estamos y por qué es una revolución en el segmento gaming. ASUS nos pone a los usuarios en las manos una consola portátil diseñada para jugar con Windows 11 en cualquier lugar. Un dispositivo de tamaño contenido, ideal para llevarlo en la mochila o la maleta, y con un derroche de potencia para que no echemos de menos el ordenador de sobremesa mientras estamos fuera de casa.
Dicho esto, voy a hablar a continuación de las novedades que incorpora esta nueva generación.
Mayor almacenamiento:
Una de las principales desventajas del primer modelo de esta consola era precisamente su almacenamiento y es que, para muchos usuarios, se quedaba algo corto. Incorpora una nueva unidad SSD de 1 TB (frente a los 512 GB de la versión original supone el doble de capacidad). De este modo, tendremos mucho más espacio para nuestros juegos, un punto imprescindible teniendo en cuenta que muchos de ellos pesan bastante o incluso necesitan espacio para las actualizaciones.
Además, también se han mejorado otros componentes internos, como su placa base con ranura M.2 2280, que favorece que el usuario pueda ampliar el almacenamiento con discos más grandes en caso de que fuese necesario.
Mejor rendimiento:
También se ha ampliado la memoria RAM, contando ahora con una RAM DDR5-7500 de 24 GB, así como su APU AMD Ryzen Z1 Extreme, que tiene la capacidad de compartir la RAM de vídeo con la RAM del sistema, de modo que se consiguen mejores imágenes, más realistas y con texturas mejoras, además de un mayor rendimiento de la consola.
Para tener una mayor compatibilidad, el puerto XG Mobile del primer modelo se ha sustituido por dos puertos USB-C (uno de ellos compatible con Thunderbolt).
Batería más generosa:
En los dispositivos portátiles es imprescindible gozar de una buena autonomía y precisamente este era otro de los puntos que se quedaron más flojos en la primera generación de esta consola. Ahora, la ASUS ROG Ally X dobla la capacidad de la batería, alcanzando los 80 Wh, para poder disfrutar de una mejor autonomía y no depender siempre de estar enchufándola mientras jugamos, un punto que me parece imprescindible porque no tiene sentido tener una consola portátil para tener que estar conectados, por lo que esta ampliación se agradece y mucho.
Ergonomía mejorada:
Su diseño también ha sufrido mejoras. Aunque a simple vista y a grandes rasgos pueda parecer idéntica, lo cierto es que tiene nuevos elementos de diseño que lo convierten en un producto mucho más maduro. Su peso ha aumentado ligeramente (tan solo 70 gramos más que la ROG Ally original), un dato que me parece más que solvente teniendo en cuenta que su batería ha aumentado tanto, como ya he comentado.
La distribución de su peso se apoya en la zona del pulgar y el índice, para que dé una sensación de mayor ligereza y también sea mejor el agarre, lo que hace que a su vez sea más cómoda a la mano. También se ha rediseñado su chasis, con el agarre más profundo y con formas redondeadas y con botones y controles con un ligerísimo cambio de ángulo, lo que facilita que sea una consola más ergonómica. Asimismo, se ha mejorado la inclinación de los gatillos y se ha reducido el tamaño de los botones macro traseros, para evitar pulsaciones fantasmas.
Según el fabricante, sus joysticks ahora son más duraderos (estiman una vida útil de 5 millones de ciclos) y tiene muelles más rígidos y una cruceta más precisa para juegos de acción, de lucha y retro.
Refrigeración más adecuada:
Este tipo de dispositivos suelen tener un problema destacado y es su refrigeración. Para evitar las altas temperaturas, contamos ahora con ventiladores más pequeños pero con aspas más delgadas, un nuevo rediseño, llamado Zero Gravity de ROG, que mejora el flujo de aire y que, acompañados por dos túneles en la carcasa del ventilador y otro en el borde superior, logra “empujar” el aire hacia fuera.
Con esto, logramos una mejor refrigeración de los componentes internos y también de su pantalla, para que no nos queme a la mano.
¿Qué más podemos esperar de la ASUS ROG Ally X?
Otras ventajas que no he mencionado hasta ahora es su interfaz Armoury Crate SE, recientemente optimizada y con una biblioteca de juegos personalizable para navegar de un modo más sencillo y exactamente a tu gusto.
Además, su pantalla Full HD de 120 Hz con FreeSync Premium nos da una calidad de imagen nítida para todo tipo de juegos.
Y, por último, es interesante destacar que esta consola con Windows 11 incluye 3 meses de Xbox Game Pass gratis, para que puedas disfrutarla desde el primer momento en que la sacas de la caja. Además, también es compatible con Steam, Epic, GOG y muchos más, por lo que podrás comprar tus juegos donde quieras y no estar dependiendo siempre de Xbox Game Pass si por lo que sea no es tu opción favorita.
Entonces, ¿merece la pena la nueva ASUS ROG Ally X?
Esta consola ya se puede reservar en la tienda oficial de ASUS, pero los envíos no comenzarán hasta finales de julio. Su precio oficial en el momento de su lanzamiento es de 899 euros. Tienes también algunos bundles para comprarla con accesorios: por 64,99 euros más te llevarás la ROG Gaming Charger Dock, por 74,99 euros adicionales te incluye los auriculares ROG Cetra True Wireless y por 89,99 euros extra conseguirás el mando ROG Raikiri.
Pero ahora vamos al turrón: ¿merece la pena la ASUS ROG Ally X respecto al modelo anterior? Sin duda. Creo que ASUS ha hecho un trabajo estupendo y si ya su ROG Ally original era una consola que valía la pena, con estas mejoras han logrado un producto muy completo y han solventado las deficiencias que podía tener.
La diferencia de precio no es ninguna locura y por apenas 100 euros podemos tener todas las ventajas que he mencionado en este artículo (más batería, más almacenamiento, mejor rendimiento, mayor refrigeración, nuevo rediseño…), por lo que sin ninguna duda si me preguntas cuál de las dos comprar, yo te recomendaría la nueva ASUS ROG Ally X.